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Cómo cuidar tu piel durante la etapa posparto

Cómo cuidar tu piel durante la etapa posparto

Los cambios hormonales del posparto, junto con los cambios físicos y emocionales de esta etapa, pueden afectar negativamente a nuestra piel. Descubre qué cambios son los más habituales y cómo cuidar tu piel en esta etapa.

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Índice

 

¿Cómo afecta el posparto a nuestra piel?

1- Manchas de la piel (cloasma o melasma): algunas mujeres pueden desarrollar manchas oscuras en la piel, sobre todo en la cara, durante el embarazo debido a los cambios hormonales que provocan un aumento de la melanina en algunas zonas. Estas manchas, conocidas como cloasma o melasma, pueden persistir después del parto en algunas mujeres.

2- Cambios en la pigmentación de la piel: la pigmentación de la piel puede cambiar en el posparto, con algunas áreas de la piel volviéndose más oscuras o más claras. Esto se debe, en parte, a los cambios hormonales que afectan la producción de melanina en la piel.

3- Estiramiento de la piel: durante el embarazo, la piel del abdomen y los senos se estira para acomodar el crecimiento del bebé. Después del parto, la piel puede tardar algún tiempo en recuperar su elasticidad normal, lo que puede llevar a la presencia de estrías, flacidez, descolgamiento…

4- Acné posparto: algunas mujeres pueden experimentar un brote de acné después del parto, incluso si no tuvieron problemas de acné durante el embarazo. Esto puede ser debido a cambios hormonales en el cuerpo ya que al reducirse bruscamente el nivel de estrógenos las glándulas sebáceas se activan para producir más grasa. Además, el estrés y la fatiga de estos meses aumentan las posibilidades de padecer acné.

5- Piel seca o sensible: los cambios hormonales pueden hacer que la piel se vuelva más seca o sensible tras el parto, lo que puede causar irritación, picor... Es importante mantener la piel bien hidratada con lociones o cremas suaves y evitar productos que puedan irritar la piel.

6- Ojeras y bolsas: el cansancio, la retención de líquidos y los cambios hormonales pueden hacer que tengas bolsas y ojeras en los ojos en el puerperio.

7- Arañas vasculares: el aumento del volumen sanguíneo en el embarazo hace que aparezcan arañas vasculares en las piernas o el rostro que se notan sobre todo en las pieles claras. Por lo general, irán desapareciendo gradualmente hacia el final del sexto o séptimo mes tras el parto.
 

¿Cómo cuidar tu piel tras el parto?

Lo primero que debes hacer, además de cuidar tu piel y seguir estos consejos, es tener paciencia ya que los cambios hormonales causados tras el parto se estabilizan en unos 6 meses, por lo que es normal que tu piel experimente muchos cambios en estos meses, así que debes tener paciencia ya que muchos de estos problemas desaparecerán solos al equilibrarse las hormonas, por lo que no debes realizarte tratamientos estéticos invasivos hasta saber si so permanentes o no.

Además, puedes seguir estas rutinas y consejos para cuidar tu piel:

1. Usar un protector solar adecuado para tu fototipo de piel, aplicándolo 20 minutos antes de salir a la calle y reaplicando si hace falta. Usa además gorro y gafas de sol y no te expongas al sol en las horas centrales del día. De hecho, en el embarazo procura evitar el sol directo en la cara para evitar el melasma. Este suele desaparecer 12 meses tras el parto, pero debes seguir evitando el sol para que no empeore y se vuelva permanente.

2. Si pasado un año las manchas no desaparece, usa una crema blanqueante que ralentice la producción de melanina, aclarando las manchas oscuras. En caso de manchas más rebeldes, consulta a un dermatólogo otros tratamientos como cremas a base de hidroquinona, ácido azelaico, alfa y beta-hidroxiácidos y retinoide, exfoliaciones químicas o láser.

3. Usa cremas hidratantes con ácido hialurónico y glicerina que eviten la sequedad, la escamación y el picor.

4. Limpia tu piel cada día por la mañana y por la noche para eliminar las impurezas y la suciedad con un jabón neutro que cuide tu pH. Utiliza un limpiador suave sin frotar para no dañar la piel. Evita los jabones que tengan sulfatos, siliconas, parabenos, fragancias y colorantes.

5. Realiza una exfoliación semanal para eliminar las descamaciones, pero mejor exfoliaciones físicas con guante de crin, evita las químicas que pueden ser irritantes en esta etapa.

6. Usa cremas que eviten los poros taponados y que combatan las bacterias que causan acné. En casos graves existen cremas con tretinoína que deben usarse con métodos anticonceptivos porque son muy perjudiciales en el embarazo.

7. Para reducir las bolsas recurre a las cremas, geles o sueros a base de cafeína y extractos de algas y péptidos. En cuanto a las ojeras, los ingredientes más efectivos la vitamina C y la raíz de morera, porque reducen la pigmentación.

8. En cuanto puedas, haz ejercicios para estirar la piel del abdomen y evitar la flacidez.

9. Sigue una dieta sana rica en frutas y verduras que aportan antioxidantes, vitaminas y minerales que favorecen la producción de colágeno y elastina para mantener la piel hidratada.

10. Bebe mucha agua, sobre todo si estás dando el pecho ya que necesitarás aún más cantidad de agua para cubrir tus necesidades.

11. Si tienes una cicatriz de una episiotomía o una cesárea debes cuidarla de manera especial para evitar infecciones y problemas. Lávalas y aplica clorhexidina dos veces al día. Es importante mantener el área seca para evitar sobreinfecciones secundarias.

12. Si tienes estrías en pecho, abdomen o glúteos aplícate emolientes específicos que ayudan a atenuarlas y después de la lactancia puedes recurrir a tratamientos estéticos más intensos. Los aceites y cremas ricas en ingredientes hidratantes, como la vitamina E o el aceite de rosa mosqueta, reducen las estrías.

13. Para evitar las grietas y daños en el pezón, aplícate cremas con lanolina para reforzar la barrera cutánea y evitar las grietas. La propia leche materna es rica en proteínas, grasas y azúcares que permiten crear una correcta barrera hidrolipídica sobre el pezón, evitando las grietas y fisuras propias de las primeras semanas de lactancia materna.

14. Utiliza un humidificador para mantener el aire húmedo y evitar que la piel y las mucosas se resequen.

15. Dúchate con agua tibia ya que el agua muy caliente puede hacer que la piel se reseque. Aclárate bien para no dejar restos de jabón.

16. Sécate con suaves palmaditas, sin frotar ya que puedes irritar la piel.

17. Intenta dormir lo suficiente ya que el sueño es un gran reparador y protector de la piel.


Fuentes:

American Pregnancy Association: Postpartum Skin Changes, https://americanpregnancy.org/healthy-pregnancy/pregnancy-health-wellness/skin-changes/

Wade TR, Wade SL, Jones HE, Skin changes and diseases associated with pregnancy. Obstet Gynecol. 1978; 52: 233-242

Fecha de actualización: 03-05-2024

Redacción: Irene García

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