¿Cómo tratar una herida infectada?
Una herida infectada es aquella en la que se han introducido bacterias, hongos o microorganismos de cualquier tipo, causando de esta manera una infección que provoca, entre otros molestos síntomas, exudado (pus) con mal olor, enrojecimiento e inflamación de los bordes de la herida
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Síntomas de una herida infectada
Hacerse una herida es algo bastante común en el día a día. La mayoría de las veces, con unos cuidados básicos, se cura y cicatriza en unos días sin causar mayores problemas. Sin embargo, en ocasiones (sobre todo cuando se trata de heridas profundas), la herida se infecta a causa de diversos microorganismos dañinos que se introducen en ella, dando lugar a una infección.
Esto ocurre cuando los gérmenes que hay en la tierra, la arena o cualquier otra superficie, entra en la sangre a través de una herida ya sea por tocarse con las manos sucias, tocar algo, piel de alrededor sucia, etc.
Los principales síntomas de una infección en una herida son:
- Presencia de pus con mal olor
- Enrojecimiento e inflamación de los bordes de la herida
- Calor local
- Dolor
- Enlentecimiento en la cicatrización
- Cambios en el color
- Fiebre si la infección se extiende por el cuerpo
¿Qué hacer cuando la herida está infectada?
Cuando una herida está infectada, es necesario actuar de inmediato. Los primeros auxilios en este caso serían:
- Lavar la herida con agua y jabón.
- Secar la zona con una gasa estéril.
- Aplicar un antiséptico con clorhexidina para prevenir la infección, una o dos veces al día. Otros antisépticos que puedes usar alcohol de 90 grados, povidona yodada, agua oxigenada, pomadas cicatrizantes... El aloe vera también ayuda a calmar y nutrir la piel.
Si la herida puede haberse infectado con algo oxidado hay que poner la vacuna del tétanos.
Si es una zona donde se pueden producir golpes fácilmente o roza con la ropa, es recomendable cubrirla con una gasa estéril.
Si aún así la herida empeora, es recomendable acudir al profesional de medicina para que haga una limpieza más profunda o, incluso, recete antibióticos.
Fuente:
Weiser MC, Moucha CS. Surgical site infection prevention. In: Browner BD, Jupiter JB, Krettek C, Anderson PA, eds. Skeletal Trauma: Basic Science, Management, and Reconstruction. 6th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2020:chap 23.
Fecha de actualización: 27-09-2022
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