¿Los niños pueden hacerse tatuajes de henna?

Índice

• ¿Qué es la henna?
• ¿Cuáles son los peligros de los tatuajes de henna en los niños?
• ¿Y la henna negra? ¿Es más peligrosa?
• Consejos para hacerte un tatuaje de henna
• ¿Y las calcomanías? ¿Tienen también riesgos?

 

¿Qué es la henna?

La henna es un polvo obtenido de las hojas de la planta Lawsonia inermis. Cuando se mezcla con líquidos, como agua, limón o té, forma una pasta que se puede aplicar en la piel.

Los tatuajes de henna se aplican con un cono o una jeringa pequeña y se dibujan diseños en la piel. Después de la aplicación, se deja secar durante un período de tiempo para que el tinte se adhiera a la piel.

Al principio aparecen en tonos de naranja a rojo oscuro. Con el tiempo, el color se oscurece y, finalmente, se desvanece gradualmente en unas semanas, generalmente de dos a cuatro semanas, dependiendo de la calidad de la henna y de cómo se cuiden.

En su forma natural, no hay nada en el polvo de henna que pueda causar irritación, ampollas, enrojecimiento o reacciones alérgicas, pero al crear la pasta se agregan otras sustancias como aceite de eucalipto que pueden causar reacciones alérgicas, sobre todo en niños.
 

¿Cuáles son los peligros de los tatuajes de henna en los niños?

1- Enrojecimiento: la piel de los niños es más sensible por lo que hay más posibilidades de que, tras la aplicación de la pasta de henna aparezcan signos de irritación como puntitos rojos, picazón o dolor.

2- Ampollas: algunos de los componentes de los tatuajes de henna pueden causar la aparición de ampollas, sacos llenos de líquido que son muy dolorosas y que nunca hay que explotar. A veces pueden transformarse en lesiones supurantes.

3- Despigmentación: el uso de estos tatuajes de henna también puede causar despigmentación de la dermis, por lo que podrían aparecer puntos claros u oscuros en la parte del dibujo donde se hizo el tatuaje una vez que este desaparezca.

4- Sensibilidad a la luz: al modificar la piel con la henna se puede provocar una hipersensibilidad a la luz solar, lo que significa que el sol penetrará con más fuerza en esa área, siendo más probable la aparición de quemaduras y otros daños causados por los rayos.
 

¿Y la henna negra? ¿Es más peligrosa?

La henna negra es muy peligrosa para todo tipo de piel, pero mucho más si se trata de la dermis de un niño.

Este tipo de henna a menudo contiene productos químicos dañinos y no es segura para la piel ya que no es realmente henna, sino un producto que contiene ingredientes químicos adicionales, como la parafenilendiamina (PPD), que le dan un color negro o azul oscuro en lugar del tono de naranja a rojo oscuro típico de la henna natural.

La PPD y otros productos químicos en la henna negra pueden causar reacciones alérgicas graves en la piel. Estas reacciones pueden incluir picazón, enrojecimiento, inflamación e incluso ampollas. Además, puede causar daño a largo plazo en la piel, lo que puede resultar en cicatrices o cambios en la pigmentación.

Y en algún caso muy grave, puede llegar a causar una insuficiencia renal grave debida a glomerulonefritis originada por la absorción percutánea de PPD.

El uso repetido de henna negra puede aumentar el riesgo de sensibilización a la PPD, lo que significa que las personas pueden desarrollar alergias más graves con exposiciones futuras.

De hecho, este tipo de henna está prohibida en muchos países y regiones, se considera ilegal o está regulada debido a los riesgos para la salud que presenta. Por ejemplo, en la Unión Europea la ley dice que la PPD no puede estar a una concentración mayor del 6 % y no puede aplicarse directamente sobre la piel, las cejas o las pestañas.
 

Consejos para hacerte un tatuaje de henna

Si tu hijo ya es mayor y queréis haceros juntos un tatuaje de henna tras un viaje especial, debes seguir estos consejos para minimizar riesgos:

- Prueba primero en un pequeño trozo de piel para aseguraros de que no le produce reacción alérgica.

- Siempre deben aplicaros henna natural o el mehndi si deseas un tatuaje temporal que es rojiza.

- Verifica los ingredientes de los productos de henna antes de su aplicación y evita aquellos que contengan PPD u otros productos químicos dañinos.
 

¿Y las calcomanías? ¿Tienen también riesgos?

Aunque puedan parecer totalmente inofensivas, las calcomanías o tatuajes adhesivos pueden causar daños en la barrera epidérmica, que pueden ser más serios en aquellos niños que tengan una piel más sensible o afecciones cutáneas como la psoriasis o la dermatitis atópica.

Y es que la piel de los niños es más fina, por lo que su resistencia y tolerancia es menor a la piel de los adultos, lo que implica un mayor riesgo de infección o irritación.

Y estas calcomanías pueden tener sustancias potencialmente nocivas en sus pigmentos, como aminas aromáticas, metales pesados y sustancias adhesivas que pueden causar irritaciones.

Por eso, los científicos recomiendan a los padres tomar ciertas precauciones a la hora de utilizar estos divertidos y atractivos tatuajes adhesivos y no usarlos en niños muy pequeños o en aquellos con problemas cutáneos.

Y al retirarla usa una crema hidratante fría o un aceite para bebé.