Crisis de lactancia o baches del crecimiento, ¿qué son y cómo superarlos?

Índice

• ¿Cómo funciona la producción de leche?
• ¿Cuándo ocurre la primera crisis de lactancia?
• ¿Cuándo ocurre la siguiente crisis de lactancia?
• La temida crisis de los 3 meses

 

¿Cómo funciona la producción de leche?

Antes de nada, es importante conocer unos conceptos básicos para entender cómo funciona y cómo se regula la producción de leche.

Si no existe una complicación concreta (que suele darse en muy bajo %), la producción de leche depende de la demanda. Esto quiere decir que, en condiciones normales, el pecho produce lo que se le pide, de una manera regular y siendo constante. Si se pide pocas veces y “a lo loco”, el pecho responderá de esa manera, en cambio, si se pide regularmente, con cabeza, sentido común y en base a las necesidades reales del bebé, el pecho es muy agradecido y acabará regulándose.

En ocasiones, los bebés pueden demandar de manera frecuente y nos hace pensar que no tenemos suficiente producción. Es muy común culparnos y tener dudas de si lo estamos haciendo bien, o si la cantidad de nuestro pecho será suficiente o de buena calidad. Otras veces podemos enfrentarnos a tirones, bebés incómodos que se retuercen y no sabemos qué les pasa. Esto puede causar mucha angustia y frustración.  Se trata de un cambio de la demanda y del comportamiento del bebé debido a estas crisis del crecimiento.

El problema lo encontramos en que, si no tienes información de calidad, puedes pensar que le falta alimento y caer en el error de suplementar con fórmula sin sentido incluso agravando la situación. Por eso es importante tener a vuestro lado un Equipo de profesionales, en este caso matronas asesoras de lactancia como Maternify (que pueden desplazarse a domicilio en toda España o ayudaros de manera online desde cualquier parte del mundo) que os puedan acompañar en todo el proceso. En casos más extremos, pero más comunes de lo que nos gustaría, incluso encontramos madres que dejan la lactancia al no recibir una atención adecuada.

Llamamos crisis, brotes o baches de crecimiento a las situaciones donde el bebé parece no estar conforme con la producción de leche de su madre. Por suerte la mayoría de los bebés experimentan estas situaciones a una edad similar, lo que nos permite entender su comportamiento.
 

¿Cuándo ocurre la primera crisis de lactancia?

El primer bache de lactancia lo podemos encontrar aproximadamente alrededor de las 3 semanas, siempre individualizando cada caso. Hay que tener en cuenta cómo comen, deposiciones, orina, sueño, entre otras. Las 3 primeras semanas suelen ser de bastante descanso y alimentación, incluso algunos padres se sorprenden de lo “fácil que es”, pero como todo en la vida, va evolucionando y cambiando, aquí lo importante es identificarlo y saber actuar.

Los principales cambios que podemos observar en esta primera crisis serían:

- Mamar de manera frecuente, en ocasiones pueden llegar a pedir cada 30 minutos.

- Regurgitan más de lo habitual al estar comiendo de manera frecuente.

- Lloran al mamar e incluso se retiran del pecho dando tirones.

¿Entonces, qué está ocurriendo?

Si lo explicamos de una manera sencilla, podemos pensar que el bebé está pegando un “estirón” y cuando antes era suficiente cierta cantidad de leche, ahora necesita más. Como hemos comentado antes, el pecho produce lo que le demandamos. Los bebés son muy sabios, como necesitan más, maman más frecuente para mandar esa señal “extra” al pecho y así producir la cantidad que necesita en estos momentos y que todo se estabilice.

Esta situación, dependiendo de cómo actuemos, puede durar más o menos días. Si entendemos que lo que hay que hacer es tener paciencia, poner frecuentemente al pecho al bebé, intentar evitar biberones de fórmula si no son necesarios, en unos 3-5 días el pecho y el bebé suelen estabilizarse volviendo así a normalizarse la situación.

Si en cambio no entiendo lo que está pasando y dudo de mí misma y mi producción y acabo dándole ese “extra” que te está pidiendo con un biberón, la producción nunca se regulará y aquí empezará el primer bache real de lactancia donde tu bebé ya empezará siempre a demandar la leche materna y ese biberón de refuerzo.

El problema viene que cada vez necesitará más producción y eso conlleva a más leche de fórmula entrando en un círculo vicioso.

Recuerda, mantén la calma, pueden ser días intensos, pide apoyo y piensa que todo pasa y así se hará más llevadero.
 

¿Cuándo ocurre la siguiente crisis de lactancia?

En ocasiones, hay madres que tienen la sensación de salir de una y entrar en otra. Después del primer bache de las 3 semanas, el segundo suele llegar alrededor del mes y medio.

Encontraremos un patrón similar y las pautas a seguir son las mismas que las que hemos indicado anteriormente.
 

La temida crisis de los 3 meses

Este bache suele ser el más temido ya que le cuesta regularse un poco más que los anteriores y ocurren algunas cosas más que conllevan a alargar ese periodo de adaptación.

En esta crisis podemos encontrar:

- Tarda entre 2-4 semanas en regularse.

- Se suma que la madre empieza a plantearse la vuelta al trabajo y es más fácil pensar en “tirar la toalla”.

- La demanda disminuye y eso lo podemos interpretar como rechazo hacia el pecho. El tiempo también disminuye, incluso pueden ser tomas de minutos, efectivas, pero cortitas.

- Los bebés empiezan a despistarse más, tomas más largas ya que comienzan a explorar el mundo y hace que se entretengan con otras cosas que no son el pecho.

- El pecho se pone más blando creando confusión, pero en realidad tiene la producción perfecta para tu bebé.

- Los bebés suelen “estancarse” en el peso que cogen semanalmente, lo que entra dentro de la normalidad.

- En ocasiones, las deposiciones disminuyen e incluso pueden estar varios días sin realizar deposición. Esto no indica que la leche que toman sea insuficiente, es sólo el desarrollo normal de los bebés.

Conclusión:

Cuando llegan los 3 meses, consiguen sacar más leche en menos tiempo, así que estate tranquila ¡que es algo positivo!

A diferencia de los primeros meses, el pecho “ya tenía la leche preparada para el bebé nada más succionar una o dos veces”. En cambio, ahora el pecho producirá la cantidad que necesite en ese momento una vez el bebé empiece a succionar y pasen unos minutos (de ahí los pechos blandos y de ahí el posible enfado del bebé al ver que no llega la leche tan rápido como antes).

Como conclusión, paciencia, información actualizada por los profesionales adecuados y pedir que te acompañen para poder disfrutar de esta maravillosa montaña rusa llamada postparto.

Autora: Carla Quintana - Matrona y fundadora de Maternify